Soñamos desde que tenemos uso de razón. Me refiero a esos sueños tan dulces que tenemos cuando nos mantenemos despiertos, siendo guionistas de nuestra propia película, nuestro propio futuro.
Hace cosa de un año, comencé a soñar con casas. O mejor dicho, con mi futura casa, mi santuario. Poco a poco mis sueños van evolucionando junto a mi experiencia y mis gustos. Se lo que me gusta, que muchas veces no concuerda con lo que una puede.
Me gusta la terraza de un ático con vistas despejadas, me gustan las casas con diferentes alturas, me chiflan los inmensos ventanales que dejan que la luz rebose, los espacios abiertos donde tus ojos no encuentran fronteras.
Juntando estos requisitos, metiéndolos en una marmita y dándole muchas pero que muchas vueltas.... nos saldría esta preciosa casa de Nueva York.
¡Soñad despiertos!
3 comentarios:
me encanta esa casa neworkina Laida!!! ¿cuándo la compramos??? :)
Oi oi oi... Entre todos ya nos llegaría oye. Te imaginas que guateques??
Pufff...no es por cortar el rollo eh...pero después de sufrir la limpieza de los cristales de mi casa, en ese atico yo solo veo horas y horas con el querido Cristasol...jijiji!
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