Os dejo un artículo en el que se recomienda con devoción regañar en voz alta con tu ser:
http://sociedad.elpais.com/sociedad/2010/05/08/actualidad/1273269606_850215.html
Además de utilizaros una vez más para hacer blogterapia, tengo que admitir que en esta época del año mi inspiración siempre vuelve. El otoño es como una canción en francés susurrada en tono menor. Es un atardecer silencioso, vacío, con la luz escurriéndose sutilmente. La lluvia va apagando poco a poco esa energía desorbitada que acumulamos en verano, dando paso a un carácter más reflexivo y devolviéndonos esa sed por aficiones que van más allá del bebercio y el jolgorio (aunque todo es cuestión de organizarse, es lo que siempre me ha dicho mi madre). El Otoño es poético.
Poético sí. Y una basura también. No aguanto que el maquillaje de la cara se mezcle con la lluvia, es una sensación devastadora. Los pies fríos están por acabar con mi salud mental. Y sé que el mundo se me va a caer el día en que una ciclogénesis explosiva tan habitual en nuestra tierra voltee y rompa una varilla de mi paraguas de Jani Markel. Es más, este otoño me inspira menos que el pasado, pues cada mañana me tengo que sentar sobre un hierro oxidado que tengo por bici, en la que pedaleo cabizbaja y con las orejas gachas. Un par de trucos para llevarlo mejor:
1) Tener una bufanda favorita cada año. Nadie sabe realmente la importancia de tener una bufanda fetiche hasta que la posee. Cuando el último gesto de cada mañana antes de enfrentarse a Mordor sea envolverse en un conjunto de átomos unidos con el único objetivo de sustituir el abrazo de un hombre fornido sabrás de lo que hablo. No escatimes en gastos, esa bufanda que solloza en alguna tienda de tu ciudad, deseosa de vivir en tu armario, hará que seas mejor persona.
Que nadie compre esta, es mía.
2) Hazte con una canción que te haga sentir un tipo guay (nunca de amor, queremos molar, no parecer un tierno osezno), te lo pones en tu IPod y te pateas la ciudad pensando que estás dentro de un videoclip. Te aseguro que llegas al curro con la autoestima bien alta, saludando por los pasillos, mirando a tu PC con amor y por primera vez en mucho tiempo sin insultar al sistema operativo (él nunca lo haría).
Os propongo una de las últimas de Lady Gaga, "Do what u want": fresca, enérgica, bailable. Sinceramente, adoro esta basurilla comercial. Una canción es buena cuando te hace vibrar, lo que se traduce en darlo todo en el baño de casa mirando tu reflejo en la mampara, o cuando sin ni siquiera ser consciente de tus actos te ves sorprendido por tu madre/pareja/gato con el móvil haciendo de micrófono. Lo siento por la poca elegancia de ese culo carnoso. Gaga es así y la queremos tal y como es.
9 comentarios:
Laida! te echaba de menos! Yo también quiero mi bufanda!!!!! :)
Yo sí que os echaba de menos! que el presupuesto ya no me da para costearme el psiquiatra, pero vosotros nunca me falláis ;-)
Peli, te tienes que hacer con una bonita bufanda, te lo digo en serio, te arropa que no veas y nunca se queja.
Laida yo te hago de siquiatra a un precio barato¡¡¡
Mientras estás haciendo cucharas en el agua no te da tiempo a estresarte¡¡¡
Señorito Pablo Narvaez, salga usted del anonimato!
No aspiro a esas cucharas con las que nos deleitas con estilazzo y tabla de pro... todavía estoy en fase de batidora, protegiéndome la cabeza como nuestro Iñigo buenamente nos enseña, con gritos y mucha desesperación.
Por cierto, fotón de perfil de Whatsapp! Like!
Can't Hold Us es mi cancion del Otoño, siempre que la oigo me entran ganas de ponerme a bailar. Ahi va http://m.youtube.com/watch?v=2zNSgSzhBfM
Soy Ism btw!
No me digas más, hoy has vuelto a casa escuchandola a tope en el coche
Yo tampoco soy anónimus, soy Dalilaida btw
Yo tampoco soy anónimus, soy Dalilaida btw
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